Los cuentos son la forma más libre de escribir, ya que su longitud, su temática, su estilo son completamente decididos por el autor y surgen de una idea que se te plasma en la mente con una resolución que varía de acuerdo a como escribes y en cierto punto no requiere una planeación tan compleja como una novela, ensayo. Son solo formas de contar historias.
Neil Gaiman es uno de los mejores contadores de historias. Prueba de ello es su libro Humo y Espejos, una compilación de cuentos donde nos narra varias historias generalmente situadas en el género de fantasía y ficción aunque con varios toques de otros géneros como lo son el policiaco, el erótico, rimas, poesia, sextinas, etc.
A mi parecer, resaltan los cuentos Caballero sobre una viejita y el santo Grial; Misterios de un crimen que nos narra la historia de un joven que está estancado en Los Ángeles y conoce a un méndigo que le narra una historia; La Vieja Peculiar de Shoggot que es un cuento ambientado en un Innsmouth (la ciudad ficiticia de HP Lovecraft) en las costas inglesas; Degustaciones, un cuento que erótico que narra una relación sexual y los poderes de "precoginición" del amante gigoló; Reina de Cuchillos que está escrita en forma de poesía; Nieve, Cristal y Manzanas cuenta una versión alterna y propia de blancanieves en verdad excelente.
Algunos cuentos tienen un desarrollo muy bueno pero al final siento que les falta el algo, no a todos propiamente.
Buen libro. Muero por Good Omens (Buenos Presagios) de Gaiman y Terry Pratchett (creo que dos de mis ingleses preferidos (súmenle Conan Doyle)), a ver si algún día lo consigo....
1 comentario:
Me lo tienes que prestar, te amo.
Publicar un comentario