Algunas de las mejores cosas susceden en viernes; es el último día de la semana para ir a la escuela o trabajar (en algunos casos; por mi parte dios bendiga la semana inglesa (no me refiero al mítico juego donde tienes que voltear al mismo lado que la chava para después recibir besos o cachetadas; la semana inglesa es el término que se ocupa para nombrar a la jornada laboral de cinco días comunmente usada en oficinas y escuelas); las salidas están a la orden del día; se vienen los días de más descanso de todos y que son por los que la gente vive: sábados y domingos.
¿Y por qué no, tal vez hasta el amor de tu vida podría aparecer? Ya lo dice la grandiosa canción de The Cure: Friday I'm in love (ah chinga si dice eso, me tendré que poner a traducirla... pero hoy no). Miles de cosas pueden llegar a suceder en un viernes.
Hoy por ejemplo, me asignaron más trabajo (sí mas, una modificación a una dll de comunicaciones, sólo es para modificar un log, pero tengo que ver bien como funciona); unas pruebillas. Fue cumpleaños de dos compañeros y fuimos a comer mariscos y me gasté más del presupuesto que tenía destinado para hoy; regresamos de la comida y por lo visto no hay mucho que hacer ya.
Hoy también empieza el año nuevo chino: El año del cerdo de fuego (o jabalí de fuego); yo soy de se signo (casualmente), espero ir como todos los años a la calle de Dolores al minifestejo. A ver que tal se pone esta vez.
Si, lo sé. Este post ha sido de los peorcillos que he postiado en últimos días.
1 comentario:
Viernes...
día burlón y soñador, el fin de semana comienza y en él ilusiones junto a quien sabe quién.
Noche del viernes.. caprichosa noche que se espera con júbilo, zambullidos en la esperanza del tal vez.
Besos
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