El primer libro de Ibargüengoitia que leí fue "La Ley de Herodes"; lo que me encantó de ese libro fue la narrativa más debrayante que haya leído hasta ese momento. No fue debrayante en sí, sino el más negro humor negro que haya leído. Sin duda me fascinó más de lo pude haber esperado de un libro que por el título me recordaba a la película homónima. Comencé a leerlo y terminé rogándole a Cosme que me lo regalara (teóricamente me lo regaló, lo tuve unos días y después me lo pidió para que su hermana lo leyera. A la fecha no lo he vuelto a ver).
Estas ruinas que vez, es una excelente narración del estado hermano del Plan de Abajo, de la ciudad de Cuévano para ser preciso. Comenzamos la historia con un pequeño fragmento de Opusculo de Cuévano que nos introduce a la gloria de la ciudad brevemente. Después comenzamos directamente con la historia en sí: Francisco Aldebarán es un profesor de literatura que va rumbo a Cuévano para dar cátedra en la Universidad de Cuévano, en el convoy en el que viaja, conoce a un compañero profesor que dará clases de filosofía y a su esposa Sarita, al chico de porvenir Rocafuerte.
De ahí comienza a desarrollarse la trama con sus compañeros profesores; Malagón, Espinosa, Montaña, etc; Gloria, la bella y por la que delira Paco a la que no intenta nada por su "enfermedad"; Sarita que se convierte en su amante, y demás venturas y desventuras en Cuévano, que finalizan de manera perfecta.
Si quieres sonreir, o reirte un poco, cualquier libro de Ibargüengoitia es bueno.
2 comentarios:
Kia Ora (Hello) from a krazy blogger down under in New Zealand. I can't understand your language, but as I was passing thru, I thought I might as well say hello to you.
Si, Ibargüengoitia es buenísimo.
"Dos crímenes" me encantó, igual "Los pasos de López".
Por cierto, gracias por el link.
Nos estamos leyendo.
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