28 julio 2009

Dulces

Hace rato regresaba de comer y compré unos dulces como postre a la comida. Compré unos Pulparindos que me remontaron a la infancia ya que, ¡oh, sorpresa!, los pulparindos no eran igual a los de antes: los de ahora no tenían la tradicional capa de azucar glass que yo y muchso otros disfrutábamos lamer antes de comenzar a engullir el dulce de pulpa de tamarindo.
Por ello, me vino a la mente los dulces que comía de niño y los cambios con los dulces de ahora.
Por ejemplo, muchos de ustedes sabrán (otros no) que el chocolate Carlos V era uno de los mejores chocolates y preferido por todos; era elaborado por la fábrica La Azteca, compañía mexiana comprada por Quaker en los 70's y en los 90's por Nestlé. Como pueden imaginarse, a mí no me tocó la original, sino la hecha por Quaker que conservaba la forma, tamaño y sabor del original. Actualmente dicho chocolate es producido por Nestlé que ha sacado varias presentaciones del chocolate (para beber, en minibarrita, cremoso, etc.)
¿Alguien se acuerda de los TicoTico, Brinquitos y Miguelitos? Todos eran polvitos de chile con azucar y sal (en el caso de los brinquitos, con sabores, y el de TicoTico sabor fresa). Era bien chido comerlos y sentir la saliva resbalando por tus mejillas. También había otra presentación de Miguelitos en chamoy líquido que generalmente se usaba (o por lo menos yo) en combinacion con un Miguelito en polvo y unos cacahuates japoneses.
Los Duvalines, los Nucita, la bota navideña de Tutsi (aunque esa sigue sin cambios), los chiles bubli, lso cacahuates Karate (que ahora hace Sabritas), el Pelón Pelorrico, la línea de paletas Vero (alguien recuerda la canción) etc... viejos recuerdos.
Por último, otra más, alguien recuerda la cadena de hamburguesas Burger Boy y el casi de culto comercial donde aparece Salma Hayek:

3 comentarios:

Deprisa dijo...

Los dulces de nuestra infancia nunca se olvidan.

Y rara vez vuelves a sentir ese sabor en tu boca, por muchas reediciones del producto que hagan.

Lo original es inimitable.

Un saludo.

Coro dijo...

Los chamoys, los tamarindos chinos... ya no son lo que eran. Y los chocolates ¡menos!
Buen artículo. Nostálgico. Y esa Salma, tan chiquilla...

Llegué a quí por el concurso del 20minutos en el que también participo, y ha sido una grata sorpresa haber descubierto tu blog.

Pásate por mis espacios, ¿ya votaste Latinoamericano y Personal y Diseño???? Ahí me tienes...

Un abrazo bien mexicano desde Cancún.

Abril Lech dijo...

Qué rico!!! Todo eso engorda!!!!