¿Cuantas revoluciones hubo en la Revolución Mexicana? Los Relámpagos de Agosto nos situa después de la muerte de Álvaro Obregón (claro con los nombres de personajes y ciudades están cambiados como siempre le hace Ibargüengoitia) en lo que se conoce (en otra gran novela que leí hace años llamada la Sombra del Caudillo) como la sucesión del caudillo. Después de la muerte de este y con tantos generales en la milicia mexicana cada quien sigue lo que para él considera "la revolución".
Es así como Jorge Ibargüengoitia nos deja en este libro una agradable idea del ambiente politico-militarizado del final de los 20's y principio de los 30's. Un libro a forma de memorias de uno de los perdedores de esa revolución que terminó con la creación del partido único PIIR (uds dir´na a quien parodia) y como ese grupo al que pertenece nuestro narrador decide irse por otro lado para las elecciones viéndose siempre mangoneado y entredicho con el "jefe" actual del país.
Personalmente, no me pareció tan genial como Los Pasos de López (aunque una vez leí en el blog de BEF que a él le parecía mejor este que los Pasos, cuestión de gustos), si me reí y me sacó sonrisas como todos los libros del autor, pero no fue realmente lo que me esperaba. Es un libro cortito, con una narrativa que si bien se parodia a cada instante con supuestas declaraciones que no dijo el protagonista no causan el sarcasmo acostumbrado como en Estas ruinas que vez o en Los pasos de López e incluso en sus cuentos biográficos de la Ley de Herodes.
Es un buen libro, eso que ni qué...
Es así como Jorge Ibargüengoitia nos deja en este libro una agradable idea del ambiente politico-militarizado del final de los 20's y principio de los 30's. Un libro a forma de memorias de uno de los perdedores de esa revolución que terminó con la creación del partido único PIIR (uds dir´na a quien parodia) y como ese grupo al que pertenece nuestro narrador decide irse por otro lado para las elecciones viéndose siempre mangoneado y entredicho con el "jefe" actual del país.
Personalmente, no me pareció tan genial como Los Pasos de López (aunque una vez leí en el blog de BEF que a él le parecía mejor este que los Pasos, cuestión de gustos), si me reí y me sacó sonrisas como todos los libros del autor, pero no fue realmente lo que me esperaba. Es un libro cortito, con una narrativa que si bien se parodia a cada instante con supuestas declaraciones que no dijo el protagonista no causan el sarcasmo acostumbrado como en Estas ruinas que vez o en Los pasos de López e incluso en sus cuentos biográficos de la Ley de Herodes.
Es un buen libro, eso que ni qué...