01 agosto 2021

¿Por qué Spider-man es mi súper héroe favorito?

Todo comenzó de muy niño. Tendría seis u ocho años, esa barrera difusa del tiempo infantil. Me recuerdo en la Combi de mis papás regresando de trabajar en los tianguis a los que solían ir a vender mercancía a los locatarios; era por Vallejo, nos paramos en una esquina. Mi papá a comprar su periódico y algunas historietas/sensacionales (de luchadores, Así soy y qué, Libro Policiaco, El Pantera, etc.) yo por mi parte rogaba por mis cuentitos: La pantera Rosa, la pequeña Lulú, Gasparín, Ricky Ricón, pero sobre todo el Hombre Araña de novedades.

Me gustaban las aventuras, creer que podían pasarme cosas como las que leía. Conocer un caballo fantasma y salir a lomos de el a ayudar a Gasparin; había visto los Goonies no se cuantas veces y me emocionaba tanto el salir a explorar: tenía mi mochila con cuerdas, tijeras, un yoyo que pudiera servirme como arma y muchas cosas que consideraba que me podían ayudarme en una aventura. Pero sobre todo el investigar qué podría pasar. Eso sí, no podían faltar mis cómics en la mochila que traía.

La primera aventura nítida que recuerdo de Peter Parker es aquella donde el Peter viaja a Canada por un tema de muertes con el Wendigo y se encuentra a Glotón quién lo ayuda a limpiar el nombre de Wendigo. La saga en cuestión es Percepciones, Tenía diez años en 1993.


Me gustaba Peter, me caía bien que siempre le pasaba algo y siempre salía adelante. La pobre tía May con sus problemas de dinero y había que conseguir un ingreso extra; que Peter tenía que aplicarse en la escuela porque sus actividades como superhéroe le quitaban tiempo. ¿Cómo ocultar los moretones y golpes para que nadie los notara..? Al final, siempre había que tomar decisiones y no siempre eran las mejores y esto, como siempre conlleva una responsabilidad que muchas veces no quieres cargar pero tienes que hacerlo porque no hay alguien más que la tome. Peter definitivamente vivía una vida dificil y a pesar de todo era feliz cuando podía.

Pero también su vida de superhéroe que lo llevaba a límites muchos mayores: ser solo un adolescente/joven teniendo que lidiar con todo por hacer bien las cosas aunque, como dijimos arriba en su vida diaria tuviera pesar. Siempre haciendo lo correcto, defendiendo a los demás, un modelo que de una manera me sirvió de ejemplo. Spider-man, a diferencia del Supes, sufría y sabía que todo cambiaría de una u otra manera.

Y a pesar de que ha habido sagas malas y buenas, siempre es esa constante de que todo va a seguir, que no importa lo que pase Peter Parker va a seguir siendo Peter antes que el Hombre Araña a pesar de que éste tome tanto o más protagonismo en su vida, Al final, sigue siendo humano y eso es lo que lo hace un héroe.

Por eso es mi super héroe favorito.


04 abril 2021

¡Adiós Paco Haghenbeck, hasta pronto!

No sé como empezar. El sentimiento es raro, no lo puedo creer. Paco Haghenbeck ha muerto.
Tengo en mi escritorio su última novela Sangre Helada leída hace algumos meses atrás; tengo un recuerdo muy cercano de él, cuando en el taller de Novela Negra de la Factoría de Historias tuvo el tiempo y ganas de transmitirnos consejos y tips de como escribir y el tema en general de la estructura de la novela. Sigo sin poderlo creer.
Mi historia con Paco fue, como siempre, un flechazo por su trabajo. Aún recuerdo claramente ese día que fui a comprar al Sanborns un libro porque ya estaba terminando el que leía en esos momentos. Era 2006, tenía un año de haber empezado a trabajar y hacía pocos meses atrás había re-descubierto a otro Paco, esta vez Taibo II. Vi Trago Amargo en los anaqueles y me llamó la atención. Ganadora del premio Un Giro de Tuerca, certamen de novela negra que desconocía. Lo tomé y leí el reverso. Salí con él a la caja para pagarlo.
Lo leí como cerveza en día de verano: de un solo trago. Me impactó tanto los agradecimientos diciendo que él como yo había encontrado a Taibo II y también no pudo dejarlo hasta que terminó todos los libros de Belascoarán... y de ahí pa'l real.
Me volví su fan después de que me enteré que junto a Humberto Ramos y Oscar Pinto había trabajado en el guión de Crimson. Que también era el único mexicano que había escrito un cómic de Superman.
Recuerdo la primera vez que lo conocí, le comenté la anécdota arriba narrada de como también no pude parar de leer a Taibo obsesivamente. Sólo se río y me dijo que bueno que así lo hiciste.
La última vez que lo vi en persona fue en la Feria del Libro de Minería cuando presentaba la continuación de El Diablo me obligó: Simpatía por el Diablo. Recuerdo que le dije, me encantó tu cuento del tributo a Taibo II donde Elvis se encuentra con los personajes del cuento de Taibo Olor a Muerto donde los protagonistas son una bruja y un enano que hacen un hechizo a un Agente de la Judicial (o Ministerial) haciendo que las manos le apesten a muerto. Gran  cuento.
Lo voy a extrañar, de tan solo pensar en todas esas historias que no van a poder ser narradas y que tenía en la cabeza.
Que en paz descanse Paco Haghenbeck